Vean un material muy condensado y bueno en el que el padre Andrew Damick nos presenta 10 aspectos de la Iglesia Ortodoxa.
¡Que lo disfrutéis!
Número 1: Es una vida en 3D. No puedes obtener una respuesta completa a esta pregunta en un vídeo de YouTube. Puedes obtenerla yendo a un espacio real, en 3D, a una iglesia ortodoxa cercana. Conoce a la gente, conoce al sacerdote, entra en contacto con la iglesia. El cristianismo ortodoxo no son solo ideas en tu mente. Tampoco son distintivos que exhibes en redes sociales. Es una vida real, vivida con personas reales, en una comunidad real, que implica cosas en 3D que haces con tu cuerpo.
Número 2: Es un lugar para la esperanza y la sanación. El mundo es caótico y todos estamos heridos. Todos tenemos heridas. La Iglesia Ortodoxa es un hospital para la curación, no una sala de juicios para declararnos culpables. Tomamos en serio el pecado, la oscuridad que todos llevamos. Y la manera de tomarlo en serio es que debe sanarse. Dios te acepta y te ama tal como eres, y su amor te transformará en lo que puedes llegar a ser.
Número 3: Es un lugar para el que fuiste creado. No importa si no tienes dinero, prestigio, poder, herencia cultural o educación. El cristianismo ortodoxo es una vida en la que cualquiera puede participar: un banquete al que todos están invitados. Un potencial de gloria y grandeza humanas que absolutamente cualquiera puede vivir. Sin requisitos previos, solo compromiso.
Número 4: Es un lugar de sabiduría. Las promesas de innovación y revolución interminables se han mostrado vanas. Hemos seguido reinventando la rueda. ¿Y si todo el conocimiento y la sabiduría antiguos sobre el ser humano, el mundo espiritual, quién es Dios y el propósito de cada cosa hubieran sido transmitidos por una tradición rica y profunda que acoge la dignidad humana en toda su complejidad? Eso es la Iglesia Ortodoxa.
Número 5: Es el lugar donde vives la historia más grande. El mundo dice que nada tiene sentido, que no hay un significado superior y que debes inventarlo tú. Esa tarea extenuante trae confusión, enfermedades mentales, depresión y aún peor. Pero la Iglesia Ortodoxa tiene la historia más alta posible: el Dios que creó todo vio nuestro sufrimiento y entró en él, haciéndose hombre exactamente como nosotros, sufriendo exactamente como nosotros. Aplastó el poder de la muerte, abriendo el camino para que lleguemos a formar parte de su consejo divino como hijos de la resurrección, hijos de Dios, iguales a los ángeles.
Número 6: Es el lugar donde se encuentran el mundo visible y el invisible. Hay un mundo de espíritus que interactúa con nosotros ahora mismo. Y muchas veces nos sentimos confusos o desamparados, incluso oprimidos o esclavizados. En la Iglesia Ortodoxa, lo invisible se hace visible y recibimos un marco para entender lo que sucede. Tomamos en serio a los ángeles, los santos y los demonios, y la tradición ortodoxa muestra quiénes y qué son.
Número 7: Es el lugar donde aprendemos a interactuar saludablemente con el mundo invisible. No solo se hace visible, sino que recibimos un programa de vida para relacionarnos con él de forma sana. Los seres humanos somos espirituales y materiales. Por eso los ritos, la oración, el ayuno, los cantos y los tiempos litúrgicos, la moral, los modos de disponer nuestros espacios y los lugares sagrados: todo ello son maneras de unirnos con Dios, con sus ángeles y sus santos, y de expulsar la influencia demoníaca de nuestras vidas. Toda la belleza, el incienso, los ornamentos, los cantos y la gloria física no son añadidos: son el lenguaje del cielo mismo.
Número 8: Es una vida vivida juntos. El cristianismo ortodoxo no es una filosofía ni un fanatismo. No es una ideología. Es una comunidad. Eso significa que nuestra soledad y nuestra falta de esperanza pueden sanarse. Es un lugar donde podemos formar familias y amistades para vivir juntos las etapas, retos y alegrías de la vida.
Número 9: Es diferente de otras iglesias. La Iglesia Ortodoxa adora de manera distinta, ve a la persona humana de modo distinto, ejerce la autoridad eclesiástica de forma distinta e interpreta la Biblia de manera distinta. No somos catolicismo sin Papa ni somos protestantes. Tenemos una historia distinta, una visión del mundo distinta a la de otros cristianos. Algunos dicen que lo diferente es que somos “del Este”. Pero no es eso: la Iglesia Ortodoxa es transcultural, y muchísimas personas de culturas occidentales y del Lejano Oriente se integran perfectamente. Yo soy uno de ellos.
Número 10: Es la Iglesia cristiana original. Los lugares donde comienza nuestra historia están en la Biblia. Son los lugares por donde caminó Jesús y a los que fueron enviados sus apóstoles por primera vez: Jerusalén, Antioquía y Atenas. Los ortodoxos han preservado las mismas enseñanzas sobre quién es Jesús, qué ha realizado y qué espera de nosotros, tal como las predicaron inicialmente los apóstoles. Entonces, ¿qué es la Iglesia Ortodoxa? Como dije al principio, no puedes obtener la respuesta completa a esta pregunta en un vídeo de YouTube, pero esto es una invitación: venid, conoced y ved a Jesucristo, porque de eso se trata.
