Un nuevo informe de la organización Aid to the Church in Need (ACN) advierte que el derecho a la libertad religiosa atraviesa una crisis sin precedentes en el mundo, afectando a cerca del 65 % de la población global, unos 5.400 millones de personas.
El estudio bianual Religious Freedom in the World 2025 analizó 196 países y detectó graves violaciones en 62 de ellos, clasificando a 24 como naciones bajo persecución religiosa y a 38 bajo discriminación.
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Solo Kazajistán y Sri Lanka mostraron alguna mejora, mientras que el resto refleja una tendencia generalizada de represión, censura y control estatal sobre la fe.
Según el informe, el autoritarismo es la primera causa de las restricciones, pues los gobiernos usan la vigilancia digital, el encarcelamiento y la censura en línea para sofocar las libertades de culto, sobre todo en lugares como China, Eritrea, Irán y Nicaragua.
“El control de la fe se ha convertido en una herramienta de poder político”, advierte el texto, denunciando una “burocratización de la represión religiosa” que busca eliminar toda disidencia.
Regina Lynch, presidenta ejecutiva internacional de ACN, señaló: “El derecho a la libertad de pensamiento, conciencia y religión no solo está bajo presión; en muchos países está desapareciendo”.
El fenómeno no se limita al mundo islámico o dictaduras, sino que se extiende a regiones como África, Asia, Europa e incluso América Latina. En el Sahel africano, grupos extremistas como Estado Islámico y JNIM han devastado aldeas cristianas, destruyendo iglesias y desplazando millones de personas.
Asimismo, en Nigeria, las milicias fulani continúan atacando comunidades cristianas, mientras en Sudán la guerra civil fuerza a miles a huir de sus tierras ancestrales.
El documento también clasifica a India y Myanmar como países de “persecución híbrida”, donde la intolerancia legal y la violencia social se mezclan con el nacionalismo religioso.
El informe identifica un nuevo factor de amenaza: el crimen organizado. En México y Haití, bandas delictivas han asesinado y secuestrado pastores y sacerdotes para imponer dominio territorial.
Incluso en Europa y América del Norte se registra un aumento alarmante de agresiones contra iglesias; Francia documentó casi 1.000 ataques en 2023, mientras Grecia, España e Italia muestran cifras similares.
ACN también reporta un incremento del antisemitismo y la islamofobia tras el conflicto entre Israel y Hamás, con incidentes religiosos que se multiplicaron hasta un 1.000 % en países como Francia.
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Sin embargo, en medio de este panorama oscuro, el informe destaca ejemplos de esperanza. En Mozambique y Burkina Faso, líderes cristianos y musulmanes trabajan juntos en iniciativas de paz y reconciliación.
Lynch enfatizó: “El derecho a vivir según la conciencia es el pulso de la dignidad humana. Donde se respeta, florecen la paz y la justicia; donde se niega, la sociedad pierde su fundamento”.
Concluyó diciendo que “la libertad religiosa es el termómetro de todos los derechos humanos; su decadencia indica el colapso moral de las libertades fundamentales”.